Ana Karem

23 de jul de 20205 min.

¡Ya tengo la idea! Y ahora, ¿Qué hago?Modelo de Negocio

Modelo de Negocio

Autora invitada: Ing. Adriana Caballero

Independientemente de la naturaleza de tu negocio, cuando se trata de emprender, siempre debes recordar el “modelo de negocio”. Y no, aunque parezca, el modelo de negocio no es algo que se menciona únicamente para hacer más complejo el camino del emprendimiento, por lo contrario, es una herramienta que te ayudará a darle forma a tu idea, impulsando así el éxito de la misma.

Enamorado de la idea

Como emprendedores, muchas veces nos enamoramos de las ideas que tenemos, tanto así que decidimos lanzarnos en un mar lleno de competidores sin conocer en primer lugar si nuestra idea tiene un mercado potencial o no, es justo en este momento donde el modelo de negocio es elemental.

El modelo de negocio nos ayudará a definir qué realmente le vamos a ofrecer al mercado, a quienes se lo vamos a ofrecer, como lo vamos a ofrecer y de qué forma vamos a generar ingresos.

No existe duda en que, al momento de diseñar un modelo de negocio, nos podemos sentir perdidos y es porque nadie tiene la capacidad de ver el futuro y conocer las adversidades que puede enfrentar su negocio. Es decir, ¿Creen que alguien confeccionó su modelo de negocio pensando que días, meses o años después llegaría una pandemia que le daría un giro de 180 grados a su forma de operar? Exacto. Es muy difícil imaginarse el futuro, sin embargo, hay metodologías que nos apoyan en esto.

Estas metodologías nos ayudan a pensar de forma más asertiva la propuesta que entregaremos al mercado.

En esta ocasión, les hablaré de la más común y también más completa de las metodologías:
 

 
The Business Model Canvas.

Ilustración 1. Modelo Canvas de Cafetería
 
Infografía: (Polo, 2019)


 

 
Este modelo tiene un esquema muy sencillo, pero te permitirá definir 9 elementos esenciales que debes tener en cuenta al momento de elaborar tu modelo de negocio:

Propuesta de valor: este es un término que resulta ser confuso, o al menos a mí, siempre me causó confusión. Dentro de la propuesta de valor debes definir todo aquello que esperas hacer mejor o simplemente de manera diferente que la competencia. La clave está en la palabra “diferente” y va muy ligada a la parte “innovadora” que le ofrecerás a tu segmento de clientes.

Segmentos de clientes: saber a quién le vamos a ofrecer el producto es prácticamente la base de un negocio y en este momento te toca describir a detalle el grupo de clientes que deseas alcanzar y cuáles son sus necesidades. Este grupo de clientes tendrá un género, una edad y unas características en común los unos con los otros.

Canal de distribución y ventas: definirás la forma en la que harás llegar tu producto al cliente. ¿Cómo harás que tu cliente sepa que tu producto existe? En esta sección estableces los canales de comunicación que utilizarás para atraer a tu cliente. Recuerda que el canal de distribución que elijas va interconectado al segmento del cliente. Ejemplo: si tu producto va enfocado a personas mayores de 70 años que viven solas y no tienen acceso a la tecnología no es recomendable que utilices una red social como canal de distribución.

Relación con los clientes: en todo negocio es mucho más fácil conseguir un cliente nuevo que te compre por curiosidad que lograr que un cliente viejo se mantenga comprando tu producto por elección propia, es por esto que debes definir como interactuar, comunicarte o relacionarte con tus clientes.
 
La comunicación es la clave del éxito y al tener una buena comunicación con tu cliente, lograrás formar una relación duradera y estable. Tienes que hacerte la siguiente pregunta:

  • ¿Cómo esperan los clientes que sea el trato hacia ellos? Esta pregunta puede tener diferentes respuestas dependiendo del segmento de clientes que se establezca.

Socios clave: hace un par de años trabajando junto a un grupo de emprendedores aprendí lo siguiente “siempre mantente amable, siempre ayuda y sobre todo siempre comparte y apoya el trabajo de los demás porque algún día estarás en ese lugar”. Dicho esto, en esta sección no solo debes contemplar aquellos proveedores que forman parte de tu negocio sino también aquellos contactos de calidad que has establecido y que te ayudarán a impulsar tu negocio.

Actividades clave: la diferencia entre las ideas de una persona que no busca emprender y un emprendedor es que un emprendedor busca hacer de su idea una realidad y la única forma de lograrlo es definiendo las actividades que deben realizarse previamente. Todo emprendedor debe visualizar su objetivo, en este caso su “propuesta de valor” y establecer con claridad las actividades que requiere para lograrlo. Estas actividades van desde la producción, el marketing, las finanzas, recursos humanos, etc.

Recursos clave: es muy común utilizar el término “recurso” para hablar de los trabajadores que se necesitan para operar una empresa, sin embargo, los recursos también hacen referencia a la maquinaria, equipo, mobiliario, transporte, entre otros. Debes especificar la cantidad, intensidad, tipo y calidad de tus recursos.

Flujo de ingresos: la mayoría de los emprendedores queremos que nuestra idea tenga éxito, pero muchas veces no pensamos en la forma en la que esta idea generará ingresos, es por esto que el modelo canvas nos impulsa a darle respuesta a las siguientes interrogantes:

  • ¿Cuánto estarán dispuestos a pagar por mi producto?

  • ¿Cuánto pagan actualmente por un producto similar?

  • ¿Qué mejoras puedo realizarle al producto para obtener el ingreso que deseo?

  • ¿Qué promociones puedo ofrecer para generar otros flujos de ingresos?

Estructura de costos: es una buena táctica desarrollar este bloque de ultimo ya que en los puntos anteriores se han definido las actividades y recursos claves que nos permitirán establecer una estructura de costos completa.

Podemos tomar en cuenta los siguientes puntos:

  • ¿Cuáles son las actividades claves más caras?

  • ¿Cuáles son nuestros recursos claves más caros?

Como les mencione anteriormente, hay diferentes formas de definir un modelo de negocio, pero lo realmente importante es darle respuesta a esas preguntas que nos permitirán entregar al cliente un buen producto o servicio. Ya sabemos que el emprendimiento es un camino difícil, sin embargo, estos datitos pueden servirte para tener una guía y hacerte más llevadero el camino.

Ahora un tip de parte de Ana K:

Nuestra recomendación es que hagas el ejercicio y no dejes que esos términos te confundan. Ya que Adriana se ha tomado el tiempo de darnos esta herramienta tan valiosa, atrévete a hacer el ejercicio.

COnsigue una cartulina blanca, post its, papelitos de colores y empezas por dividirla como el formato que te dejamos a continuación. Y empieza a jugar, para definir tu marca y tu negocio.

Este puede parecerte tonto al principio, pero te iras dando cuenta de un montón de detalles que o no tenías planificado, o no tenias como prioridad y que son el punto clave que estabas ignorando.

Cuando termines, tomale una foto o guardalo muy bien. Este Canvas de tu negocio de ayudará en el futuro a mantener el Norte, e incluso, ver los recursos que ya posees en momentos en los que necesites acudir al cambio.

Formato para hacer tu Business Canvas: https://www.google.com/search?q=business+canvas+lienzo&rlz=1C1LOQA_enPA680PA698&source=lnms&tbm=isch&sa=X&ved=2ahUKEwiBrNr-_uPqAhXuT98KHbklBP0Q_AUoAXoECBIQAw&biw=1517&bih=694

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